Al respecto, el Secretario del establecimiento Eugenio Aucapiña señaló que la situación se debe a la “explosión” de unos cables de luz que atraviesan el cielo raso de la escuela, lo que afecta a todas las aulas.
“Se elevaron notas al Ministerio de Educación, pero como no tuvimos respuestas, decidimos hablar con autoridades del municipio solicitando que un electricista visite el establecimiento. Este realizó un relevamiento y llevó a cabo un informe que fue enviado a infraestructura escolar”, manifestó.
Asimismo, expresó que ante la constante queja de los padres de los alumnos por la falta de clases, ayer martes se desarrolló una reunión para informales que no les brinda una solución al problema.
“El corte se produce en un ala de la escuela, pero la parte del pasillo que da hacia las preceptorías sigue funcionando, por lo que existe el peligro latente de que se produzca un incendio o que la suspensión del servicio sea mayor”, dijo.
Por otro lado, Aucapiña recordó que hace más de dos años fueron beneficiados por un proyecto nacional para la construcción de un nuevo edificio escolar, y a pesar de que la obra fue aprobada y licitada en el 2017, la misma se encuentra paralizada.
“El proyecto está trabado por un recursos de amparo presentado por la empresa que ganó la licitación. La comunidad educativa se encuentra esperanzada en que se desarrolle dicha iniciativa porque es necesario una nueva escuela”, finalizó.