Después de un sábado inolvidable, a puro oro y con muchos festejos, el último día de los Juegos Panamericanos de Lima le sigue aportando alegrías a la delegación argentina que finalizó en el sexto lugar del medallero.
En su última jornada, Agustina Roth (la campeona en los Juegos Olimpicos de la Juventud) se colgó la de bronce en BMX Freestyle, y José Torres obtuvo la de plata en la misma especialidad y estas medallas del Ciclismo fueron especiales: con estos dos éxitos, nuestro país superó las 100.
La delegación argentina resultó, sin dudas, una de las animadoras de los Juegos Panamericanos de Lima. Los atletas albicelestes desempeñaron un gran papel en la cita desarrollada en Perú. Los deportistas nacionales acumularon 101 medallas: 32 de oro, 35 de plata y 34 de bronce. Y se ubicaron en la sexta posición de la tabla general por detrás de Estados Unidos, Brasil, México, Canadá y Cuba.
El deporte en conjunto fue uno de los grandes impulsores de la histórica actuación. El hockey ganó en ambas ramas y se metió en Tokio 2020, mientras que el fútbol masculino se quedó con el título y al femenino se le escapó en los penales; el vóley de varones defendió la dorada y las Panteras fueron bronce, en tanto que los Gladiadores tuvieron su título y el pase a los Juegos Olímpicos y La Garra fue subcampeona; en básquet, los hombres cumplieron los pronósticos al ser campeones y en las Gigantes estuvo la única mancha: papelón con las camisetas y quinto puesto final.
Desde el agua suelen venir muchas medallas, esta vez no fue la excepción y la natación, con Delfina Pignatiello a la cabeza, tuvo una destacada presentación al sumar nueve. Julia Sebastián y Santiago Grassi lograron marcar para Tokio 2020. Argentina dominó el medallero en canotaje velocidad con siete y tres aportó el canotaje slalom, mientras que el remo mejoró por mucho la imagen de Toronto y con nueve preseas apenas quedó detrás de Chile. Aguas abiertas aportó dos plateadas al igual que el surf y la vela cosechó siete, quedando únicamente por detrás de Brasil.
Otro deporte que sumó éxitos fue la pelota vasca, que no había estado en Toronto. Prometía alegrías y la delegación nacional no defraudó: tres doradas, dos plateadas y tres de bronce. México, el único que superó a Argentina en el medallero.
El tiro deportivo también tuvo muy buenos Juegos Panamericanos y quedó tercero en su medallero por detrás de Estados Unidos y Cuba. El tiro con arco logró una histórica dorada en el compuesto mixto, la esgrima aportó cuatro preseas y el ciclismo tuvo a un argentino en el podio en pista, ruta, BMX, BMX freestyle y MTB.
Tenis, Skeet, equitación, pentatlón y vela también lograron plazas para los Juegos Olímpicos de Tokio; las chicas del ráquetbol se fueron de Lima con cuatro medallas y el softbol, que llegaba como campeón del mundo, lo ratificó con una actuación sobresaliente.
Belén Cassetta consiguió la única presea del atletismo, mientras que el judo -sin podios- fue uno de los deportes que en comparación a Toronto (había ganado cuatro medallas) bajó considerablemente su rendimiento.
