El secretario adjunto de ATE, Rodrigo Guerrero, detalló las medidas de fuerza que llevarán a cabo de aquí en adelante, definidas en el plan de lucha gremial que busca mejorar las condiciones de vida de los trabajadores jujeños.
En primer lugar, definieron un paro por 48 horas sin asistencia a los lugares de trabajo para este jueves 21 y viernes 22.
Además, anticipó que el próximo miércoles 27 marcharán por calles del centro capitalino en el marco de un nuevo paro provincial.
“Queremos que se defina de una vez por todas el pase a planta, lo de los capacitadores e instructores que vayan pasando a tener una mejora laboral con contrato de servicio”, dijo.
En esta línea, el reclamo salarial también ocupará uno de los ejes centrales de la movilización del 27.
“Hoy por hoy los compañeros no llegan ni siquiera a la primera quincena del mes con sus salarios”, sostuvo y expuso la situación de algunos municipales que “están por debajo de la línea de la indigencia prácticamente con sueldos de 15, 20, 25 mil pesos”.
Si bien la dirigencia de ATE mantuvo reuniones paritarias con los funcionarios de Gobierno, consideran que el ofrecimiento oficial “no se equipara con la realidad”.
“Creemos que falta bastante para poder equiparar la pérdida del poder adquisitivo en los salarios de la administración pública”, cerró.
