El ministro de Gobierno y Justicia, Normando Álvarez García había anunciado que reanudarían las negociaciones salariales y este miércoles empezaron a reunirse con los gremios estatales.
La dirigencia de ATE fue la primera en retomar la discusión con los funcionarios y desde ese sector elevaron una propuesta al Gobierno.
“Presentamos una propuesta de 30% para los tres meses que faltan más un bono de $20 mil para empezar a avanzar”, dijo Carlos Cabana, secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado.
Si bien “el Gobierno todavía no ofreció nada”, la intención de los trabajadores es fortalecer una posición que les asegure al menos no seguir perdiendo frente a la inflación, además de otras demandas.
“Queremos avanzar con las nóminas del pase a planta y contrato de servicio, el contrato covid que sería bueno que el Gobernador hoy los reconozca”, siguió.
A pesar de que fue la primera reunión paritaria después de meses y aún resta la convocatoria a los otros gremios, Cabana dijo que el Gobierno aseguró el pago de un bono a fin de año.
“El bono nos dijeron que sí va a haber, pero no nos dijeron de cuánto. La propuesta quedó ahí porque faltan otros sindicatos que también están llevando propuestas”, expuso.
“Estamos más de un 10% debajo de la inflación”
La titular de APOC, Susana Ustárez, habló de “discriminación” ya que el ejecutivo anunció que llamaría a los gremios por separado y empezaría por los que tienen más afiliados. En ese sentido, consideró que “el Gobierno vuelve a dividir a los gremios” y sostuvo que el pedido tiene que ser “una paritaria unificada para debatir y lograr consenso”.
“En 2022 estamos en un 55% de inflación mientras los salarios no alcanzan el 45%, de manera que estamos más de un 10% debajo de la inflación”, apuntó la gremialista.
Ante este panorama, dijo que la paritaria “debe mantenerse abierta para ir monitoreando el proceso inflacionario y mes a mes ir avanzando con los salarios”.
“El tan temido 100% anual que podemos llegar a tener este año nos obliga a tener una paritaria permanente con el Gobierno y marcar incrementos mensuales. Esto significa no perder poder de compra, no es un aumento de salarios. Aumentar sería que mejorara el poder de compra y esto no ocurre. Es más, venimos perdiendo frente a la inflación desde hace siete años”, cerró.
