Como todos los fines de año, los jujeños se preparan y palpitan, no sólo la llegada del nuevo período, sino también uno de los eventos más convocantes y tradicionales de la provincia: la Chaya de Mojones.
El 1° de enero miles de “carnavaleros” viajan a Maimará para vivir al mediodía la fiesta en la que se agradece a la Pachamama y se le realizan pedidos mientras se canta y se chayan con bebidas a las apachetas o montículos de piedra.
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Las comparsas y las bandas más tradicionales le ponen ritmo y color al evento que es una previa de lo que se vive en las fechas de Carnaval en la Quebrada de Humahuaca, donde la espuma, el talco, la serpentina y la albahaca se convierten en protagonistas.
