Daniel Hove compartió un vínculo inquebrantable con su perro, Gunner, tanto que fallecieron con una hora de diferencia.
Daniel, un veterano de la Fuerza Aérea que se convirtió en jefe de bomberos, fue diagnosticado con cáncer de páncreas en 2011 y durante todo el tratamiento, que incluyó muchas rondas de quimioterapia y cirugía, la mascota se mantuvo a su lado.
La hija de Hove, Heather, explicó que la pareja compartía un vínculo muy cercano. Gunner, el labrador de 11 años, siempre se encontraba cerca de su dueño. "Fueron los mejores amigos hasta el final. Iban juntos a todas partes", dijo la joven.
A nadie sorprendió cuando el can comenzó a enfermarse al mismo tiempo que la condición de su dueño se deterioró. Todos en la familia sintieron que se Gunner iba a la par de Daniel.
Un día, el perro se volvió más apático y sus patas comenzaron a hincharse. Heather lo llevó al veterinario y decidió que era mejor dejar que Gunner no sufriera: "Le dieron una inyección y murió. Volví a casa y una hora después, mi papá murió".
Fuente: Telefe Noticias.
