El montañista tucumano logró llegar a la cima de Manaslú, en Nepal, la octava montaña más alta del mundo.
La cima fue alcanzada a las 1.33, luego de 10 horas de caminata sin asistencia de oxígeno o sherpas. Kusnezov, acompañado por el bonaerense Matías Emiliano Marin, se convirtió en el argentino más joven, con 24 años, y el primer tucumano en conquistar una cumbre en el Himalaya.
Junto al porteño Matías Emiliano Marín, Kuznesov coronó la cumbre del Manaslu, de 8.163 metros sobre nivel del mar, uno de los "ochomiles" que está en Nepal. Fue el último jueves, a la 1.33 de nuestro país, tras más de 10 horas de ascenso. Ambos andinistas llegaron hasta la cima sin utilizar oxígeno ni sherpas, los guías nepaleses que acompañan a los expedicionarios. “No concibo mi vida sin la montaña. Me veo siempre en esto, como actividad, como hobby, como trabajo. La filosofía de la montaña me gusta y me gusta trasladarla a la ciudad”, dice Kuznesov quien prácticamente nació en la montaña. Es nieto e hijo de montañistas. “La adrenalina supera al miedo y eso lo que nos da fuerza para realizar nuestra actividad. Tal vez si nos pusiéramos a considerar todas las consecuencias posibles no podríamos hacer nada”, reflexionó el escalador.
El muchacho, junto a la Asociación Argentina de Montaña, y en su función de guía y logística, desarrolló una expedición al Ojo del Salado, el volcán más alto del mundo con 6.891,30 metros de altura. “Al retornar de esta expedición empezaré a trabajar por mi próximo objetivo personal: hacer experiencias en el Himalaya”, había declarado a La Gaceta en febrero pasado, cuando se estableció como próxima meta escalar el Manaslú.
Fuente: TN
