Juan Jenefes

Una charla de café... Derecho a ingresar al país

Por Juliana Carbó y Juan Jenefes.

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12-07-2021 15:33

La nacionalidad es el vínculo jurídico que une a cada persona con un País, del cual nacen derechos y también obligaciones para ambos. Tener una nacionalidad es un derecho humano (art. 15 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, 20 de la Convención Americana sobre derechos humanos), no tenerla es una condena a la exclusión, implica no acceder a un piso básico de derechos.

Uno de los derechos, profundamente vinculado a la nacionalidad es el de entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino. Este derecho está expresamente reconocido en tratados internacionales de derechos humanos y en el art. 14 de nuestra Constitución Nacional para todas las personas que habiten la Nación, agrega el artículo que este derecho se goza de acuerdo a las leyes que lo reglamenten, lo que implica que no es un derecho absoluto y que hay que ejercerlo de acuerdo a la normativa que lo regula.

Estas normas afirman que ingresar al país de uno es un derecho humano que debe ser garantizado por estos estados. Las normas también hablan del derecho a salir del país y la posibilidad de restricción por ley.

Dicho esto y bajándolo al escenario actual de pandemia y al hecho de que hay alrededor de 25.000 argentinos esperando para retornar al país -a su país- podemos afirmar que el Estado Argentino ha viola los derechos humanos de estas personas al restringir su entrada.

¿Autoriza la situación de pandemia, que el Estado restrinja el derecho de ingreso? ¡Claro que NO! La limitación de ingreso a nacionales argentinos constituye también una prohibición indirecta a salir del mismo. Tampoco resulta válida ninguna declaración jurada que se firme para “aceptar” restricciones de derechos, menos sin saber de cuáles serán las medidas futuras tomadas en relación a esa declaración, qué implica en definitiva que, los derechos humanos son irrenunciables.Amnistía Internacional (ONG internacional dedicada a la promoción y protección de los derechos humanos), se levantó en contra de esta medida y precisó que “el Estado no te puede obligar a que firmes nada donde vos renuncies a tus derechos”. Estas palabras de Mariela Belski, directora ejecutiva de la nombrada ONG, son contundentes contra la medida de restricción de derechos.

La salida de ciudadanos del país, obedece a varias circunstancias, las cuales se encuentran vinculadas a otros derechos como el comercio, el ejercicio de la industria lícita, a trabajar, a la salud y derecho al esparcimiento.

Debemos decir que, si bien ningún derecho es absoluto, cualquier restricción debería estar determinada por ley, una norma dictada por el Congreso Nacional. Además, debe ser razonable, lo que quiere decir que debe ser hacerse para un determinado fin, debe servir para lograr ese fin, dentro de las distintas opciones debe ser la mejor y la que menos restrinja derechos ya que, si hay otra que puede lograr lo mismo, lo ideal es que el “recorte” en derechos sea lo menos posible.

El gobierno ha restringido el derecho de ingreso y salida con motivo de la nueva variante “Delta” de la COVID-19 y que argentinos y argentinas no habrían cumplido con las medidas de aislamiento luego de su ingreso al País.

La medida carece de razonabilidad, basta ver lo que sucede en otros países, como por ejemplo Inglaterra, donde la variante tiene transmisión comunitaria y sin embargo aquellos ciudadanos gozan de mayores libertades que los nuestros.

En este sentido, si bien la variante es de gran preocupación y sin duda requiere de medidas para reducir su impacto, el Estado debe actuar con previsibilidad sin culpar a los que viajan de la falta de eficiencia del proceder administrativo.

Los argentinos tenemos que exigir que las medidas -aún cuando son tomadas en un contexto de pandemia- nos den cierta previsibilidad. Debería ser lo habitual poder confiar en que si el Estado nos deja salir del país, nos va a permitir regresar, esta actitud es la que tiene que tener un Estado de Derecho en el cual existe la seguridad jurídica, y a más de un año de pandemia no podemos más que exigirla.

Por esto y basados en el derecho humano de la nacionalidad de nuestros hermanos varados en distintos lugares del mundo, a través del cual acceden al derecho de ingresar a su propio país, es que nos sumamos al pedido de que con urgencia se tomen las medidas necesarias para que esto ocurra.

Que el Estado Argentino por una vez, legisle y gobierne para todos y todas.

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