En conferencia de prensa, el propio gobernador Gerardo Morales confirmó la decisión del juez de la quiebra, de dar por concluida la posibilidad de que la empresa Omega Energy compre el Ingenio La Esperanza.
El mandatario sin embargo anunció que el grupo tucumano Budeguer ofertará en los próximos días para la compra de la planta azucarera y 30 mil hectáreas, por lo que otras 40 mil hectáreas quedarán en manos de la Provincia.
El grupo Budeguer es una empresa familiar con sede en Tucumán, que cuenta con un conglomerado que administra seis empresas de distintos rubros, y que cuentan con mil empleados. Esta empresa se convirtió en el tercer productor de caña de azúcar del país y de Latinoamérica y ya adquirieron en 2010 el ingenio Leales.
Morales ratificó que la zafra del próximo año está garantizada, y que el gobierno hará un esfuerzo hasta que se concrete la venta y el nuevo oferente se haga cargo del ingenio.
Por su parte, el juez de primera instancia en lo Civil y Comercial Nº 9, dr. Juan Pablo Calderón, desestimó el recurso de revocatoria, denegando el de apelación, formulado por los representantes de Agroindustrias La Esperanza S.A. Alesa. El magistrado consideró que el Acta de Directorio presentada por Alesa, es nula, ya que no cumple con las formalidades exigidas por la Ley de Sociedades, ni con lo dispuesto por el Código Civil y Comercial.
El juez Calderón además argumentó entre otros puntos, que otro incumplimiento fue la falta de acreditación de los trámites de aumento de capital social, hasta la suma mínima de 50 millones de pesos y el traslado del domicilio de la sucursal de la empresa a la provincia de Jujuy.
El juez de la quiebra aclara que la empresa tenía un plazo de cumplimiento de 90 días hábiles, desde el 28 de agosto de este año para integrar el capital social mínimo requerido, el cual además de garantizar la consecución del objeto de producir azúcar y alcohol se encuentra dirigido a terceros, como el Estado Provincial y los Acreedores de la quiebra, que al momento de cobrar sus créditos se topan con la responsabilidad limitada de los integrantes de una sociedad anónima.
Finalmente el juez Calderón, recuerda que Alesa, estaba obligada a presentar una carta de crédito otorgada por una entidad bancaria de primera línea, con operaciones en el mercado financiero argentino y regulada por el Banco Central de la República Argentina.
Como se observa, el juez Calderón, hizo múltiples observaciones a los incumplimientos de la empresa que pretendía comprar La Esperanza, por lo que rescindió el acuerdo.
El gobierno tomó rápidamente nota de esta situación buscando otro oferente, que esperemos resuelva la producción y la continuidad de empleo de 600 trabajadores y sus familias, que dependen de la planta azucarera.
