Los penales de Jujuy tienen el doble de internos que el número que permite su capacidad, informó el inspector general Daniel Chaile, jefe del Servicio Penitenciario.
El funcionario indicó que las celdas en los establecimientos de Gorriti y Alto Comedero están creadas para ser habitadas por una persona, pero dada la cantidad de presos en su mayoría son compartidas para "sanear la sobrepoblación", ya que las comisarías están saturadas.
Chaile detalló que hay un total de 450 celdas pero la cantidad de internos es 870, es decir, la capacidad está superada casi en el 100%. A pesar de ello, explicó el inspector, el Ministerio de Seguridad realiza refacciones y readecuaciones de diverso tipo para acomodar a la población interna en los penales.
El responsable del Servicio Penitenciario de Jujuy sostuvo que la sobrepoblación carcelaria genera numerosas situaciones potenciales de riesgo, que pueden ir desde un motín a alteraciones masivas. Estos hechos pueden ocurrir, indicó, si el personal no es suficiente y no posee la capacitación adecuada.