Iris García, que junto a su esposo Nélson Tolaba y su cuñado Cristian, están imputados por el crimen de Ester Carrasco, pidió ampliar su declaración y confesó haber cometido el crimen, dando un giro inesperado en la causa.
La imputada confesó haber sido coautora del crimen de la mujer de 35 años que fue encontrada calcinada en la zona de Los Molinos, en noviembre del año pasado.
En este sentido, García implicó como autora principal del crimen a su amiga, una peluquera de identidad reservada que figura en la causa como testigo clave.
La declaración espontánea que brindó en su momento esta testigo llevó a la Brigada de Investigaciones a detener a García, a su esposo, y a su cuñado, que luego de ocho meses, siguen detenidos.
“Nunca confié en la testigo”, afirmó el abogado defensor de García. “No entiendo por qué desde el área de la investigación se la protegió y ahora después de ocho meses el Dr. (Alejandro) Bosatti hace lugar a las investigaciones sobre sus celulares, cuando es algo que yo venía pidiendo”, señaló.
De esta manera, y a raíz de la confesión de García, los hermanos Tolaba quedarían desvinculados de la causa. “Están hace ocho meses presos indebidamente”, destacó el abogado.
EL MÓVIL DEL CRIMEN
Según señaló el abogado defensor de García, y en base a la confesión de la imputada, el móvil del crimen no habría sido una cuestión pasional como se creía en un primer momento, sino que aparentemente se trataría de una cuestión económica.
