El reconocido local “La Lili” ubicado en barrio Almirante Brown, en la jornada del domingo fue clausurado luego de llevarse adelante un importante operativo policial. Tras el allanamiento, se detectó exceso de capacidad, como así también otras irregularidades.
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Al respecto, Bruno Jerez, subsecretario de control de la Municipalidad capitalina, manifestó que el local tenía habilitación municipal en el rubro de restaurant/bar, pero que considerando las reiteradas denuncias por parte de los vecinos y tomando conocimiento de que se utilizaban las instalaciones como after, procedieron a trabajar en conjunto con la Policía de la Provincia.
“En reiteradas ocasiones nos apersonamos en el local, pero al hacer los controles de día ´La Lili´ tenía función normal. Sin embargo, habíamos realizado actas de comprobación otras veces pero no podíamos ingresar como inspectores municipales porque en altas horas de la noche, hasta el día siguiente, funcionaba con la puerta cerrada con seguridad en el ingreso”.
“Por ese motivo coordinamos con Policía de la Provincia y el domingo logramos ingresar en el local mediante la fuerza policial y encontramos que había más de 150 personas mientras que estaba habilitado para no más de 50”, agregó Jerez.
Por otra parte, el subsecretario de control enfatizó que la Municipalidad realizó dos actas particulares, mientras que la Policía efectuó otras. En ese sentido, detalló que la clausura preventiva se llevó a cabo por el exceso de capacidad y por las malas condiciones de seguridad de higiene y edilicias.
“Nosotros tenemos remitidas todas las fotos y videos, donde se puede observar que el local está en malas condiciones con baños sucios, instalaciones eléctricas en malas condiciones, igual que los techos y puertas. Ayer hicimos una clausura preventiva para que el Juzgado Contravencional determine la colocación de las fajas y determine su apertura o clausura definitiva”.
Por último, el funcionario municipal destacó que en el último mes y medio lograron cerrar otros dos locales de relevancia, “lugares puntuales conocidos por todos y que manejaban información de la noche”. En consecuencia aseveró que uno de ellos se encontraba en calle Junín y en avenida El Éxodo.
