La Cámara de Diputados iniciará este martes el debate de la Ley de Presupuesto 2023. El Gobierno confía en que el oficialismo contará con los votos necesarios para alcanzar el quórum, lograr la media sanción y que sea girado al Senado, pero hasta última hora continúan las negociaciones.
Este año, el Ejecutivo gobernó sin Presupuesto, luego de que el Congreso rechazara el proyecto presentado por el entonces ministro de Economía, Martín Guzmán. Los números de Sergio Massa acercaron posiciones, pero algunos puntos en discordia podrían hacerlo peligrar nuevamente, entre ellos, las facultades que le otorga al Gobierno para aumentar las retenciones hasta diciembre de 2023 y el pago del Impuesto a las Ganancias por parte de los integrantes del Poder Judicial.
En el recuento de votos que se hacen en forma permanente en las oficinas y pasillos del Congreso, los números le dan al oficialismo luz verde para habilitar el debate, con 130 bancas que tendría aseguradas.
Sucede que, si finalmente Juntos por el Cambio decide no dar quórum, a los 117 diputados propios, el oficialismo sumaría ocho votos del Interbloque Federal; cuatro de Provincias Unidas; uno del Movimiento Popular Neuquino y, contrarreloj, negocia las dos bancas de Ser.
Hasta ahí, los números acompañarían al Frente de Todos para garantizar el debate en el recinto, pero al momento de la votación el escenario no está tan claro. En el entorno de Massa dan por descontado que, una vez alcanzado el quórum, lograrán obtener los votos necesarios para aprobar el proyecto de Presupuesto en lo general y que quedará para los contrapuntos los temas más álgidos.
La alianza de Massa con los gobernadores, promesas incluidas, y con Máximo Kirchner dejan el Gobierno muy cerca de la media sanción, aunque saben que se complicará la votación en particular de esos artículos. En tanto que el rol de Cristina Kirchner será clave en el Senado y ahí será entonces donde se traslade la contraofensiva de la oposición.
Fuente: Todo Noticias