El uso de la música en pleno quirófano, quizás, sea algo muy visto en las series y ficciones para el común de las personas. No obstante, es una completa realidad que varios doctores y enfermeros prefieren ponerse manos a la obra con su artista favorito de fondo. Ahora, un niño de diez años fue operado en un hospital de Italia mientras uno de los doctores del equipo tocaba un piano de cola situado dentro de la sala.
Un equipo de 16 profesionales de la salud participó en la cirugía para extraer un tumor en la médula espinal al chico en el Hospital Riuniti de la ciudad de Ancona. Lo más increíble fue el papel de uno de ellos, un biólogo molecular y compositor llamado Emilio Torso, que no solo se puso el ambo y los accesorios para el quirófano, sino que acompañó durante todo el proceso tocando el piano, algo que ocurrió por primera vez en la historia.
El jefe del departamento de neurocirugía de la institución médica, Roberto Trignani, explicó a la Agencia EFE: “Una atmósfera mágica de completa armonía inundó el quirófano en la operación que duró alrededor de cuatro horas”.
Por otro lado, los demás doctores aseguraron que, pese a estar bajo anestesia general, el niño sonreía levemente de vez en cuando mientras trabajaban. Según Trignani, pudieron identificar que el joven sentía la música gracias a su encefalograma, donde veían que “cuando la música se interrumpía el patrón cambiaba”.
El equipo consiguió extraer completamente el tumor y ahora los médicos esperan los resultados de nuevas pruebas que determinarán si su paciente necesitará pasar nuevamente por quirófano o no. “Estoy bien. Y por suerte, oí la música”, contó el niño de 10 años a los medios después de la intervención.
El aporte de las melodías y los ritmos en circunstancias tan serias como una operación ha sido investigado hace varios años. En 2017, expertos de la Universidad Queen Mary de Londres, en Reino Unido, analizaron los resultados de 73 ensayos controlados aleatoriamente donde se observó el impacto de la música en la recuperación postoperatoria, en comparación con la atención estándar u otras intervenciones no médicas como los masajes.
La conclusión fue que existe un vínculo entre la música en la sala de operaciones y una reducción significativa del dolor postoperatorio. El estudio fue publicado en la revista científica The Lancet e involucró a 7000 pacientes.
Sus resultados confirmaron que hay una relación entre la música que se reproduce en la sala de intervenciones con una reducción del dolor, la ansiedad y la necesidad de medicación de alivio tras la operación.
Fuente: Todo Noticias.
