Con el propósito asesorar a padres y familiares con niños diagnosticado con Trastornos de Espectro Autista (TEA), se llevó a cabo el viernes pasado un taller sobre el uso de la medicación y tratamientos.
La modalidad de la capacitación fue una charla informativa a cargo de integrantes del equipo médico de la Fundación IDEAS, quienes además de sus exposiciones, respondieron inquietudes y consultas de los asistentes.
Jorge Valdez, pediatra de la institución, resaltó que el objetivo principal del encuentro fue reforzar la idea de “un uso correcto” de la medicación en el caso de que sea indicada por un profesional, y advertir los posibles riesgos de implementar tratamientos alternativos.
Al respecto explicó que el uso de psi fármacos en niños con TEA es implementado, como “una última instancia y una vez agotada todas la terapias posibles, en casos donde se presenten cambios en su conducta y que los mismos afecten la dinámica familiar”.
En cuanto a las terapias “no convencionales” centradas, en algunos casos en dietas libres de gluten y caseína e insumo de aceite de cannabis, remarcó que “si bien son estudiadas por distintos profesionales en el mundo, no cuentan aún con el aval científico”.
En el caso de alimentación resulta difícil modificar en los más chicos hábitos de consumo, lo que generaría complicación en el proceso de socialización en el seno familiar. “Está demostrado que las dietas de estas características no son útiles, solo en casos de enfermedades del tipo intestinal, como la celiaquía”, advirtió el profesional, quien señaló la importancia de consultar ante cualquier duda a un médico.
Con respecto al uso medicinal del cannabis, señaló que aún ese producto no está reconocido por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat).
Lo que todavía no se ha probado científicamente, pero para lo que existen informes basados en la experiencia, son los efectos de la administración de cannabis con un alto contenido en cannabidol (CBD) y otros tipos de cannabis en forma de aceite.
Para finalizar, instó a los padres a ser “precavidos” con el consumo de la medicación recetada, tanto en relación a la cantidad de la dosis como a su periodicidad.
