Debbie y Michael Campbell son una pareja de jubilados estadounidenses oriundos de Seattle. Pero no llevan un estilo de vida convencional: hace casi 6 años decidieron dejarlo todo y lanzarse a la aventura de viajar por el mundo.
"Después de investigar y preparar presupuestos, decidimos intentarlo, pero teníamos que reducir nuestros gastos. Vendimos nuestra casa, la lancha y uno de los autos, y redujimos nuestras pertenencias al máximo posible. Yo renuncié a mi trabajo como organizador de eventos deportivos y Debbie cerró su empresa de publicidad y diseño gráfico. Siete meses después, en julio de 2013, comenzamos nuestra aventura", contó Michael a Clase Ejecutiva.
En su cuenta de Instagram, Senior Nomads, se puede seguir su periplo: llevan recorridas más 275 ciudades en 83 países del mundo. En marzo estuvieron en Buenos Aires y no dudan en volver a la Argentina próximamente.
"Antes de llegar a la Argentina sólo habíamos visitado Perú y Chile en la región, pero apenas arribamos nos dimos cuenta de lo diferente que es con respecto a esos dos países. Y tal vez, de los demás también. Desde el primer momento que llegamos a Buenos Aires deseamos haber planeado quedarnos más tiempo, pero como reservamos nuestro viaje por Sudamérica con anticipación, estábamos limitados a quedarnos sólo 10 días", comenta Michael.
Durante su estadía recorrieron el centro porteño, San Telmo, Recoleta, Palermo, La Boca y pasaron un día en el Tigre. Y si bien el tiempo les pareció poco, cuentan que vieron una ciudad "limpia y hermosa con muchos espacios abiertos y plazas, barrios vibrantes y una destacable arquitectura europea.
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CÓMO VIAJAN
Debbie y Michael siempre llevaron un estilo de vida de cambio constante. Viajaron mucho y, por ejemplo, vivieron 5 años en Londres. Ambos aseguran que les gusta "probar cosas nuevas y asumir riesgos" y aprovechan cada oportunidad para conocer un lugar nuevo.
"Para llevar adelante este estilo de vida es muy importante tener y mantener una metodología de los viajes y planificar todo de acuerdo al presupuesto. Si bien planeamos cada uno de los viajes que emprendemos con un mes de anticipación aproximadamente, nos gusta también improvisar", revela Debbie.
Cuando empezaron, en 2013, hicieron una lista de 36 países que querían conocer y diferentes presupuestos para evaluar la viabilidad del proyecto. "Nos dimos cuenta que podíamos viajar todo el tiempo gastando lo mismo que necesitábamos para vivir en Seattle", asegura.
"Es fundamental asignar un presupuesto para cada viaje. Anotamos los gastos y actividades y vamos controlando el presupuesto a medida que avanza el viaje. La clave es vivir tu vida diaria, no como si estuvieras de vacaciones. En cada ciudad que visitamos viajamos en transporte público, cocinamos, lavamos la ropa y nos alojamos en Airbnb", explica Michael.
Fuente: Cronista.
