La historia de “Luz”, la beba recién nacida que fue dejada por su madre en una comisaría de Monterrico, causó gran revuelo en Jujuy, tanto en las redes sociales como en las conversaciones cotidianas. Incluso personas enternecidas y conmovidas con la historia quisieron hacerse cargo de la menor para brindarle el calor familiar que tanto necesita.
El tema puso de relieve la acción que llevan a cabo muchas familias jujeñas, como las que integran los “Hogares de Belén”, que albergan en sus casas bebés que se encuentran en estado de abandono.
América “Arita” de Leona, subcoordinadora del Movimiento Familiar Cristiano al que pertenecen los “Hogares de Belén”, comentó que realizan el trabajo “bajo Juzgado”.
“El Juzgado de Menores nos llama, nos dice que hay un chico abandonado” y a partir de allí eligen el hogar más capacitado para ese niño, comentó Arita.
Las familias no reciben ningún subsidio, “los atendemos con nuestros propios ingresos”, manifestó.
Actualmente hay tres niños en "Hogares de Belén", aunque son aproximadamente trece las familias que forman parte del sistema. Algunas están en descanso porque entregaron un bebé hace poco tiempo, o se encuentran a la espera de que soliciten su ayuda.
La mujer indicó que se deben cumplir tres requisitos para poder recibir a los pequeños. Uno es “el no querer quedarnos con el bebé”, aunque “muchas veces la gente se inscribe creyendo que se pueden quedar con él”, y no es así, dado que, "cuando el Juzgado define hacia dónde va el niño lo devolvemos".
Además, no pueden averiguar sobre el pasado del niño, y una vez que la Justicia definió el destino del menor, “no podemos seguir viéndolo si los papás adoptivos no quieren”.
La tarea que llevan adelante estas familias es, sin duda, de una nobleza y amor destacables, ya que brindan cuidado, abrigo y amor a un pequeño hasta que desde la Justicia determinen su hogar definitivo.
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