Cómo reclamar si tu vuelo se retrasó y qué compensación te corresponde

Cuando tu vuelo enfrenta un retraso considerable, es fundamental conocer tus derechos y las compensaciones a las que podrías tener derecho. La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) brinda directrices claras sobre cómo proceder en estas situaciones. En esta guía, exploraremos los pasos que debes seguir para reclamar y qué compensaciones puedes esperar.

La normativa de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) establece que si tu vuelo sufre un retraso de 3 horas o más, existe un derecho a recibir una compensación económica. Esta regulación está respaldada por la normativa europea y busca garantizar a los pasajeros afectados una compensación adecuada. El monto de esta compensación varía según la distancia del vuelo y la duración del retraso.

Pasos para reclamar la demora en un vuelo y la compensación:

Si experimentas un retraso significativo en tu vuelo, sigue estos pasos para reclamar tu compensación:

1. Contacta a la Aerolínea: Comunica el retraso a la aerolínea responsable y asegúrate de tener documentos como tu tarjeta de embarque y confirmación de reserva a mano.
2. Completa el formulario de reclamo: La aerolínea debe proporcionarte un formulario para presentar tu reclamo. Si no hay una respuesta o si rechazan tu reclamo, es posible recurrir a la AESA o considerar la opción de un tribunal.
3. Otras compensaciones por retraso: Además de la compensación económica, si tu vuelo se retrasa por más de dos horas, la aerolínea está obligada a brindarte asistencia que incluye alimentos, bebidas, llamadas telefónicas y, en casos necesarios, alojamiento y transporte.
4. Excepciones por circunstancias excepcionales: En situaciones excepcionales como condiciones climáticas extremas o huelgas, las aerolíneas podrían quedar exentas de pagar compensaciones. Sin embargo, siguen siendo responsables de proporcionar asistencia y servicios a los pasajeros.
5. Recursos de ayuda: Entender tus derechos y proceder con una reclamación puede ser complejo. Si necesitas ayuda, considera recurrir a profesionales especializados o asociaciones de consumidores que pueden guiarte a través del proceso.