El panorama para el "mellizo", es oscuro y no se logra ver una luz en el final del túnel. Hace varios meses que no logra encontrar un funcionamiento, una idea, una fuzión entre sus dirigidos, y los resultados estan a la vista.
En la noche de ayer, perdió por la mínima ante Gimnasia de la Plata, que sin dudas jugó el partido como lo que era, una final, un pase a cuartos. Eso no se pudo ver en el xeneize, que a medida que transcurría el tiempo, eran mas las dudas que las certezas para Guillermo. Tampoco tuvo tanta buena suerte, sin su arquero Esteban Andrada, y sin su lateral titular Leonardo Jara (ambos lesionados), y la salida a los 12' del primer tiempo de Dario Benedetto, tuvo que buscar otras alternativas para este cotejo que era clave para levantar el ánimo.
El y su mellizo. Los dos solos en el silencio abismal del Mario Alberto Kempes, fue la última imagen de la noche del jueves post derrota ante el lobo platense. ¿Dialogaban sobre su continuidad? ¿O simplemente trataron de evitar a la prensa?
Las palabras de Carlos Izquierdoz, defensor de Boca, dejó fuertes declaraciones y resaltó que "el equipo no tuvo actitud y eso no puede pasar".
"Estoy re caliente. No hicimos nada de lo que teníamos que hacer, el rival nos superó en actitud y eso no puede pasar. Ellos jugaron como una final. Acá no se gana con la camiseta, se gana adentro de la cancha. Hoy ellos se plantaron como once hombres dentro de la cancha", manifestó el defensor.
Guillermo tiene la tarea de cambiar el chip urgentemente. Este fin de semana enfrentará a Colón de Santa Fe por la Superliga, y el martes se medirá nuevamente ante Cruzeiro por la Libertadores. Estos dos duelos, son las últimas cartas que le quedan al técnico xeneize, si quiere seguir...
