Ahora que pasamos prácticamente todo nuestro tiempo en casa, cocinar se convirtió en una actividad ideal para matar el tiempo, probar recetas nuevas y comer algo que nos reconforte. Hay preparaciones para todos los niveles de destreza culinaria y que llevan ingredientes que podemos tener en nuestros hogares o que son poco usuales.
Este sábado compartimos una receta muy sencilla y con pocos elementos: bizcochitos de queso. Son ideales para acompañar el mate y no implican mucho tiempo de dedicación. Con todo lo que te dijimos, no te quedan excusas para hacerlos y compartir en familia.
INGREDIENTES
250 gramos de harina 0000
150 gramos de manteca (podés usar un poquito menos)
150 gramos de queso rallado (podés usar un poquito más para que quede más sabroso)
2 huevos
Sal
PREPARACIÓN
Si tenés procesadora, ponés todos los ingredientes allí y se arma en pocos segundos la masa. Si no tenés, no importa, ponés todos los productos en un recipiente y los integrás bien. Es importante que la manteca esté blanda pero no derretida.
Lista la masa (que no necesitás amasar mucho, solo hay generar un preparado homogéneo), llegó el momento de estirarla con un espesor de un centímetro aproximadamente. Después la cortás con la forma que más te guste.
Poné los bizcochitos en una placa o asadera enmantecada o con un poco de rocío vegetal y llevalos al horno, que tiene que estar en temperatura entre media y fuerte pero bien precalentado, no te olvidés de prenderlo antes de iniciar con la preparación.
Los dejás en el horno unos 10 minutos aproximadamente, hasta que veas que están doraditos en la base y los das vuelta y dejás otros 5, para que tomen un poco de color del otro lado.
¡Listo! Ahora sólo hay que armar el mate y disfrutar. Sabemos que son tentadores, pero tratá de no quemarte al comer uno recién salido del horno.
