Tener una vivienda, un novio o una novia, concluir los estudios universitarios, conseguir un auto, un camión o viajar, son algunos de los “deseos” que muchos de nosotros quisiéramos cumplir. Según la tradición boliviana, todos los 24 de enero, cada uno debe comprar aquello que anhela para su vida en pequeñas figuras metafóricas que no superan el tamaño de la palma de la mano.
En Jujuy habrá hoy dos Ferias de Alasitas: una se desarrollará en la Asociación Boliviana "6 de Agosto", ubicada en barrio Villa San Martín, junto al puente Senador Pérez, a partir de las 10; y otra organizada por la Comunidad Boliviana "22 de Enero", que tendrá lugar desde hoy viernes y hasta el domingo en la Vieja Estación de la capital jujeña.
Habrá de todo, para todos y todas. Quien quiere trabajo comprará una llama pequeña, quien ya tiene un oficio buscará un muñequito que lo represente garantizándole prosperidad.
Hay cholitas que cargan sandías para las verduleras y muñequitos con quenas para los músicos. Los que esperan una amada compran una gallinita y las que quieren novio, un gallo; mientras que los que desean familia, eligen un bebé. Entre lo básico que se requiere para la vida nadie deja de comprar comida (hay mini bolsitas con el sello de un kilo que contienen granos reales de quinoa, arroz o maíz), panes, frutas y verduras.
También dinero, cómo no: se ofrecen pesos, soles, dólares o euros, de unidad o en fajitos. Quien quiere un auto va y lo compra, con papeles y licencia. Porque acá hay algo importante: la representación del deseo es tan real que puede ser “fatal” olvidar alguno de los elementos necesarios para alcanzar el sueño completamente.
Somos Jujuy visitó en 2019 la Feria de Alasitas
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