El fiscal Diego Funes que lleva adelante la investigación por supuestos hechos de extorsión en organizaciones sociales indicó que está avanzado el análisis de la información obtenida en los allanamientos realizados en junio pasado y aseguró que “hay elementos de prueba que estarían confirmando la hipótesis delictiva”.
En ese sentido indicó que como parte de la investigación se está analizando investigar también los movimientos de dinero que hubo en las cuentas bancarias de las organizaciones y sus referentes.
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“Hasta ahora, lo que se ha analizado viene a corroborar la existencia de una cierta obligatoriedad para asistir a las marchas, un cierto control con planillas de asistencia en la que la persona tiene que firmar la hora en la que llega a la marcha y la hora en la que se retira”, explicó Funes en relación a lo que se pudo obtener de la documentación secuestrada y de lo extraído de computadoras y celulares.
Indicó además que “pudimos determinar que hay un aporte que realizan periódicamente estas personas a las organizaciones” y señaló que “nos queda avanzar en la afectación a la libertad que tiene cada una de estas acciones”.
En ese sentido, afirmó que “hay elementos de prueba que se van arrimando a la causa que hasta ahora estarían confirmando la hipótesis delictiva inicial”.
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Las organizaciones sociales son investigadas por supuestos hechos de extorsión a partir de la denuncia de beneficiarios de planes sociales que aseguran que fueron amenazados con la quita del beneficio si no asistían a marchas o si no aportaban dinero.
El fiscal Funes aclaró que en el marco de la investigación hasta ahora no hay personas demoradas ni imputadas, sino “personas sindicadas como posibles autores del delito de extorsión”.
En cuanto a cómo continuará la investigación, Funes indicó que “vamos a ahondar en el análisis de todo lo que ya hemos secuestrado” y adelantó que se analizarán cuentas bancarias para “ver si existen movimientos de dinero considerables que también refuercen la hipótesis”.
UNA NUEVA INVESTIGACIÓN EN PUERTA
Por último, Funes se refirió a documentación secuestrada que podría originar una investigación por otro tipo de delito. El fiscal manifestó: “estamos investigando una hipótesis delictiva que tiene que ver con el delito de extorsión, pero en los allanamientos se encontró documentación, que también se secuestró, dónde hay manuscritos como de una especie de plan de acción, no sé cómo describirlo, pero donde se mencionan atentados, concretamente usan esa palabra”.
“Esto no puede ser soslayado. Seguramente será motivo de una pericia caligráfica para determinar qué persona ha realizado ese escrito y seguramente motivará en ahondar la investigación por otro hecho”, expresó.
En relación a quienes serían las supuestas víctimas de estos hechos, explicó “no se hace mención pero sí habla de atentado, incluso está, entre signos de pregunta, quiénes participarían”.
“Creo que amerita abrir una investigación en ese sentido”, finalizó Funes
