Su nombre es Paolo Luis Paoloni, su vida estuvo ligada siempre a los caballos y esto lo llevó a estudiar veterinaria en la Universidad Nacional de Tucumán. Después de tres años de investigar, pensar y sobre todo soñar, diseñó un dispositivo que permite anestesiar animales de manera inhalatoria para cirugías complejas.
Paolo dialogó con Somos Jujuy y contó que esta idea comenzó con un dibujo en un cuaderno y la buena voluntad de un ingeniero amigo. “El beneficio es que podes hacer cirugías más complejas durante mayor tiempo con este equipo. Con una anestesia inyectable sería mucho más riesgoso para el animal y la idea es que sea portátil para poder operar a los animales en el campo”, señaló.
Esto que ahora es un hecho y se configura como la oportunidad de poder atender a un animal de manera menos riesgosa comenzó hace tres años. “Empecé a pensar en esto cuando estaba estudiando, cuando conocí a unos cirujanos de Santa Fe y vi que usaban anestesia inhalatoria”, explicó haciendo una introducción.
Posteriormente Paolo conoció a Walter Elizalde, un reconocido veterinario a nivel nacional. “El me mostró que había una válvula y me dijo cómo era el sistema dibujándomelo. Después leyendo, averiguando en internet y copiando fui armando esto. De todas formas hay muchas cosas que las fui probando y así salieron”, detalló.
Para perfeccionar la técnica y lograr el éxito con este dispositivo Paolo conoció a un profesional que es catalogado como el mejor en el rubro de la anestesia animal. “Después me fui a hacer un curso con Raúl Lamuraglia que está en un hospital que es el mejor centro de Latinoamérica en caballos. Ese loco es un genio y me ayudó a cerrar algunas cosas. Me trajo algunos elementos de Estados Unidos que eran los que me faltaban y pude avanzar”, afirmó el jujeño.
Con los conocimientos en la cabeza y la idea latente, Paolo habló con un ingeniero amigo, Fabián Perea. “Me imaginé el equipo y lo dibujé en un cuadernito. Se lo pasé a Fabi que tiene un programa para armarlo y después imprimirlo en 3D. Le pasé una pieza, me la mandó y la imprimí. Después me hizo otra pieza que también se la dibujé y logró diseñarla bien”, especificó reconociendo el gran apoyo de un amigo de la infancia.
Hasta ahora este dispositivo ayudó a hacer cirugías de baja complejidad en el campo con la idea de ir “poniéndolo a punto”.
El equipo se encuentra en Tucumán, lugar donde Paolo reside y tiene su veterinaria. “La idea es poder hacer un respirador mecánico que es lo que me estaría faltando, ojalá sea este año”, finalizó el profesional avizorando un nuevo desafío.
