EDUCACIÓN
Una preocupante situación vivió una familia en un colegio privado de la capital jujeña, ubicado en calle San Martín al 1200. Según relató el abogado Juan Bartolini, sus defendidos fueron discriminados en la institución educativa.
"El colegio tuvo una mala actitud: mi defendido y su hijo vinieron a pagar el mes y pedir una factura electrónica, la cual todos los comercios emiten, pero le dieron un recibo sin ningún tipo de valor. Lo más llamativo tuvo que ver con la discriminación, poca seriedad e irregularidad que tiene este colegio", apuntó.
Es que tras exigir el comprobante de pago de la cuota del colegio y recibir un documento apócrifo, el estudiante habría sido injustamente sancionado con cambios de calificaciones indebidas, los cuales constan en la libreta.
"En una materia tenía un 8, se lo borraron y le colocaron un 1", expuso el letrado en relación a las "irregularidades" con que se maneja el colegio céntrico.
Tras esa situación, realizaron las denuncias correspondientes en defensa del consumidor "porque es una institución privada que tributa factura y a la vez brinda un servicio educativo", indicó Bartolini, y otra denuncia ante la Secretaría de Gestión Educativa.
"Si tenemos un director y una directora que tratan mal a un padre y a un alumno que vinieron a pedir una factura como corresponde por las cuotas que se abonan y en lugar de eso reciben una factura de papel tipo C que ya no utilizan los comercios, y además agravios como 'tengo 5 títulos más que vos', lo cual está en una grabación de la persona que vino a hacer el reclamo, evidentemente hay una discriminación", sentenció el abogado.
