Cada 22 de febrero se celebra el Día de la Antártida Argentina por la inauguración del Observatorio Meteorológico en la Isla Laurie que tuvo lugar en el año 1904. Esto marcó el inicio de la permanencia ininterrumpida de la Argentina en ese lugar.
El Mayor del Ejército, Luis Balmaceda, quien se desempeña como jefe de la Base Carlini, junto a la segunda jefe, Carolina Jara, dialogaron en exclusiva con AM630 para contar cómo es vivir en el continente blanco.
“Es una satisfacción para nosotros poder aportar un granito de arena en esta reivindicación de la soberanía nacional”, señaló Balmaceda poniendo en valor el rol de cada una de las personas que viaja a la Antártida.
Según comentó tanto Balmaceda como Jara, se trata de una experiencia que requiere preparación e implica una contribución a la actividad científica que se desarrolla en el lugar.
“Actualmente somos 65 personas de las cuales aproximadamente 35 son parte del personal de verano porque desde noviembre hasta marzo viene personal científico”, comentó Carolina Jara explicando también que después de marzo solo quedan 29 personas pasando la época más difícil: el invierno.
El día a día en la base Carlini
Balmaceda y Jara coincidieron en que sus días en la base Carlini no distan de lo que sería su jornada laboral en un lugar más convencional. “Tenemos rutinas y horarios de trabajo, lo que sí es diferentes es la presencia del viento y del frio. Últimamente tenemos muchas lluvias y un día normal arranca con una reunión de coordinación de las actividades del día y cada persona sale a hacer su labor”, sostuvo el Jefe.
El Ejercito desarrolla un papel crucial dentro de la base dado que efectúa el apoyo logístico a quienes van con tareas científicas a la base.
En cuanto al desarraigo, Carolina celebró las redes sociales y la posibilidad de acceder por medio de un celular a una videollamada para estar “un poco más cerca” de la familia. “Manejamos internet por turnos, no tenemos la cantidad de horas de conexión que cada uno tienen en su casa porque el ancho de banda es limitado pero está organizado por turnos”, manifestó.
En relación a los amigos y a una vida social distinta, Carolina explicó: “Uno sabe que no está a la vuelta de la esquina, está a una llamada de celular o a un mensajito de WhatsApp, eso hace que no sea tan duro”. Por otra parte, el día a día acompañando al personal científico hace que la jornada laboral pase “volando”.
Por otra parte, estar en la Antártida tiene “un plus”, tal como cuenta Carolina que mientras brindaba la entrevista relató que al mirar por la ventana podía divisar el glaciar y ver a una foca. “Esto es incomparable e incomparable”, sentenció.
Una jujeña dentro de la delegación de la Base Carlini
Dentro de la delegación que aporta todo el accionar logístico para que en la Base Carlini se pueda hacer ciencia hay una jujeña. Balmaceda relató con mucho orgullo: “Tenemos una satisfacción muy grande de estar acá, hay gente de distintas parte de Argentina e inclusive tenemos una integrante de Jujuy que seguramente va a estar muy contenta con esta comunicación”.
Jara por su parte detalló que se trata de Gisela Calapeña, una joven que se encarga de la electricidad de los motores que usan para navegar. “Es mecánica de motores, está en la parte de mantenimiento de generadores, se encarga puntualmente de la electricidad y de los motores que se usan para buceo y navegación. También hace mantenimiento del parque automotor, sin dudas juega un rol muy importante para nosotros”, finalizó.
Sobre la Base Carlini
La Base Carlini cumplió 40 años de funcionamiento como la principal instalación científica permanente en la Antártida Argentina, donde se realizan investigaciones en áreas como biología costera y terrestre, oceanografía, geología y glaciología.
La base, ubicada en Caleta Potter, Isla 25 de Mayo, es administrada y operada por la Dirección Nacional del Antártico (DNA), dependiente de la Cancillería.
Las investigaciones se desarrollan allí de manera ininterrumpida desde hace más de dos décadas, lo que permitió una recopilación de datos científicos dentro de las de más larga data y completa de la región antártica.
