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Qué pasó en la tragedia en Blaquier y cuál fue el gas que intoxicó a los seis fallecidos

El operario Ricardo Bottega bajó 12 metros para reparar una bomba cloacal y murió asfixiado. Los otros cinco vecinos que fueron en su rescate también perdieron la vida

El hecho ocurrió en la localidad bonaerense de Blaquier (Foto: Gentiliza Proyecto Pulpería).
El hecho ocurrió en la localidad bonaerense de Blaquier (Foto: Gentiliza Proyecto Pulpería). Proyecto Pulpería

Somos Jujuy por Somos Jujuy | 18-03-2024 16:48

En la localidad bonaerense de Blaquier, un operario identificado como Ricardo Bottega descendió 12 metros en un pozo de bombeo para reparar una bomba cloacal. Sin embargo, durante el proceso, Bottega y otros cinco vecinos que intentaron rescatarlo perdieron la vida.

Tras las autopsias realizadas por la Policía Científica del Departamento Judicial de Junín, se determinó que las seis personas fallecieron por "asfixia mecánica por broncoaspiración". Este desenlace se atribuyó a la presencia de gas metano en el pozo, generado por el sistema cloacal. Aunque aún no se ha establecido la cantidad exacta de gas inhalado por cada individuo.

Los investigadores sugieren que Bottega pudo haber cometido un error al no realizar una tarea preventiva antes de abrir las tapas del pozo y al trabajar sin los equipos de protección adecuados. Se presume que ingresó al pozo sin máscara de protección, enfrentando condiciones peligrosas como aguas servidas y gases tóxicos.

Aunque se baraja la posibilidad de un error humano, aún queda por determinar si hubo algún desperfecto adicional que contribuyó a la tragedia. Las autoridades continúan investigando para esclarecer completamente lo sucedido en Blaquier.

Parte oficial de la autopsia
Parte oficial de la autopsia

El trágico suceso

Seis personas murieron asfixiadas el viernes pasado luego de un frustrado intento de rescate de un operario que trabajaba en un pozo de bombeo de 12 metros de profundidad, perteneciente al cuerpo de Bomberos Voluntarios del lugar.

El cruento hecho comenzó cuando Ricardo Bottega -un conocido bombista de 60 años, oriundo de Ameghino- fue contratado por el municipio local para realizar tareas de mantenimiento rutinario en el sistema de red cloacal, arreglar una bomba, en un sitio conocido -por su forma- como “el cigarro”.

Allí, el hombre ingresó para realizar sus labores pero con un detalle fatal: sin máscara de protección ante alrededor de 70 centímetros de aguas servidas y frente a los gases que emana el líquido condensado. Ante este panorama, el hombre comenzó a sentirse mal y no pudo salir a la superficie.

En un comunicado oficial emitido por la Municipalidad de Florentino Ameghino se expresó que “frente al pedido de auxilio efectuado por el responsable de las cloacas, Ezequiel Rodríguez, se acercan vecinos con la intención de colaborar en el rescate”. Junto a Bottega había dos personas que lo asistieron y pudieron salir del pozo para pedir auxilio, ellos salieron mareados -bajo los efectos de los gases cloacales- y pudieron alertar a los vecinos. Están fuera de peligro, aunque permanecen internados en el Hospital Municipal de Ameghino.

Por el llamado de socorro, llegaron Carlos Renger, bombero voluntario de 39 años; Alejandro Centeno (36); Mateo Pellegrino, otro bombero de 27 años; Juan Ramón Sánchez (50); y Nicolás Sánchez, (28) hijo de Ramón. Sin embargo, “a medida que descendían con esa finalidad sufrieron las consecuencias, presumiblemente, asociadas a la inhalación de gases concentrados”, destacaron fuentes oficiales. Y fallecieron los cinco.

Qué es el gas metano y sus consecuencias en la salud

El metano, componente principal del gas natural o biogás, es un gas incoloro y altamente inflamable.

Es uno de los principales gases existentes en las plantas de tratamiento de aguas residuales junto con el sulfuro de hidrógeno y dióxido de carbono.

La exposición elevada a este gas puede ocasionar dificultades para hablar, problemas de visión y pérdida de memoria en las personas. Incluso, la acumulación de estos gases puede provocar la muerte por falta de oxígeno o, en algunos casos, la explosión cuando se une a una fuente de ignición.

El metano se produce por la descomposición o putrefacción de la materia orgánica y puede introducirse en la atmósfera tanto por procesos naturales, como la descomposición de la materia en los pantanos, las filtraciones de gas de los depósitos del subsuelo o la digestión del alimento del ganado, o por actividades humanas, como la producción de lubricantes y gas, el cultivo de arroz o la gestión de los residuos.

Quiénes eran las víctimas fatales

Bottega tenía 60 años, tres hijos y seis nietos. Le decían “Duende”. Era oriundo de Florentino Ameghino y se dedicaba a realizar este tipo de tareas de mantenimiento. También era músico. Se destacaba tocando el acordeón, tenía una radio en su casa y lo contrataban para animar eventos.

Las otras cinco víctimas eran vecinos de Blaquier. El más joven era Mateo Pellegrino, quien tenía 27 años y se graduó de médico veterinario en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Nacional de La Pampa. Oriundo de Lincoln, a 120 kilómetros de Blaquier, le gustaba el fútbol: era hincha de Independiente y jugó en el Club Social y Deportivo Blaquier. Algunos lo llamaban “Gringo”.

Cuatro de las seis víctimas fatalesEl suboficial de Bomberos Voluntarios Juan Ramón Sánchez (50) y su hijo, el cabo Juan Nicolás Sánchez (28), también perdieron la vida.

El primero era aficionado al automovilismo y también jugó al fútbol, como arquero en la Liga de General Villegas. El menor de los Sánchez era conocido como “Juani” o “El Flaco”. Tenía una hija de apenas un año y, al igual que su padre y que Pellegrino, también le gustaba mucho el fútbol: en su caso, jugó en Deportivo Ameghino y en Deportivo Blaquier.

Los otros dos bomberos que fallecieron al querer rescatar a Bottega fueron Carlos Renger, de 39 años, y Alejandro Centeno, de 36.

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