La ciudad que se encuentra a 815 kilómetros de Moscú protagonizó y fue cómplice de la eliminación de tres selecciones que supieron ser, en algún momento, campeones del mundo.
En la fase de grupos, Alemania se despidió al caer sorpresivamente frente a Corea del Sur. Ya en octavos de final, Argentina fue la víctima del Kazán Arena, luego de perder ante Francia. Y ahora Brasil, el pentacampeón del mundo, tampoco logró irse del estadio con una sonrisa tras caer frente a Bélgica.