Rusia volvió a mostrar buen fútbol, le ganó 3-1 a Egipto y se meterá en la próxima ronda si Arabia no le gana a Uruguay.
La Selección local jugó frente a la Selección de Egipto, en el inicio de la segunda fecha de la fase de grupos. El juego, que corresponde al Grupo A, se disputó en el Zenit Arena de San Petersburgo y contó con el arbitraje del paraguayo Enrique Cáceres.
En la primera mitad se prestaron la pelota. Se dividieron la tenencia, y el desarrollo entonces fue parejo. Pero el ahogo que ejerció el local en los primeros minutos dejó la sensación de que fue más y mereció mejor suerte, pero todos sus centros fueron imprecisos.
La presencia de Mohamed Salah en los Faraones -ausente en el encuentro ante Uruguay por lesión- mantuvo en vilo al equipo ruso, porque sabía que no podía descuidarse. Y aunque participó poco, todas las pelotas pasaron por él y tuvo una que se fue muy cerca.
Pero todo cambió en el complemento. Porque el dueño de casa se apoderó por completo del juego y pasó por arriba a los egipcios. Ya en el primer minuto, los Osos presionaron y obligaron a Ahmed Fathy a meter un gol en contra cuando trataba de despejar un centro.
La marea de Rusia no aflojó, y en tres minutos liquidó el partido. A los trece, Denis Cheryshev amplió el resultado con una buena jugada personal (y metió el tercero en la Copa, alcanzando a Cristiano Ronaldo como goleador). Y a los 16 Artem Dzyuba hizo estallar San Petersburgo con otro más, que sentenciaba el resultado.
Y por más que Salah descontó a los 28 de penal (sí, otro que obra el VAR), el anfitrión nunca vio peligrar el triunfo, el segundo en su Copa y ante su gente, con ocho goles a favor y uno solo recibido.
Fuente: Todo Noticias.