Por el confinamiento en el marco de la crisis sanitaria y ante el avance inflacionario, autoridades de los colegios privados habían manifestado su preocupación por la disminución de la matrícula y el aumento de la morosidad en el pago de las cuotas de parte de los tutores.
Al respecto, Norma Lozano, miembro de la Asociación Jujeña de Instituciones Educativas Privadas (Ajiep), aseguró que la situación empieza a cambiar, aunque todavía tienen algunas demandas insatisfechas.
“Vimos en instituciones privadas que se recuperó la matrícula prepandemia. En ese sentido fue favorable el panorama dado que se redujo el nivel de morosidad. Pasamos de una morosidad de hasta un 50% a tener una de entre un 20% y 30%”, expuso.
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La preocupación de las autoridades radica en que “el mayor ingreso de los colegios privados es la cuota”.
“Dependemos de la matrícula y de que los padres puedan sostener el pago de las cuotas al día dado que con estas demoras se dificulta estar al día con las deudas de las instituciones: proveedores, sueldos, Afip, contribuciones”, señaló.
Lozano comentó que desde que comenzó la pandemia las autoridades desplegaron distintas estrategias para subsistir y gracias a ello ningún colegio cerró sus puertas definitivamente.
“Algunas instituciones lograron recibir el ATP que dio el Gobierno nacional y otras optaron por préstamos bancarios con tasas financiadas y diferentes operaciones que aún están saldando”, dijo.
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Si bien en este sentido el panorama es favorable, la mujer sostuvo que todavía están en la lucha por conseguir una subvención de parte del Estado que ayudaría a hacer frente al pago de sueldos docentes, concepto que ya reciben 3 de los 16 colegios nucleados en Ajiep.
