SAN SALVADOR
por La crisis del transporte se profundiza en Jujuy y dadas las circunstancias actuales se vislumbra un 2024 complejo en cuanto a medidas de fuerza de los choferes y sistemáticos aumentos de las tarifas. Además, hay incertidumbre sobre los aportes nacionales y la previsibilidad se torna imposible.
“Hasta la fecha no llegaron subsidios nacionales del mes de enero, esto nos preocupa porque el sistema necesita de certezas”, expresó al respecto el presidente del Concejo Deliberante de San Salvador de Jujuy, Lisandro Aguiar, en diálogo con Sin Vueltas, por AM630.
El concejal capitalino informó que se constituyó una “mesa de diálogo con los distintos actores por la situación que está viviendo el sistema de transporte, que es muy grave y preocupante”. En ese sentido, recordó que en el mes de diciembre desde el Concejo se sancionó la emergencia del sector.
“Implica dar la facultad al Ejecutivo de rediseñar líneas y frecuencias para eficientizar las prestaciones, también se ordena el análisis de costos del sistema en la ciudad y se prorrogó la fórmula polinómica, autorizando a aplicarse de manera mensual el aumento en lugar de cuatrimestralmente”, precisó sobre la normativa aprobada en el órgano legislativo municipal.
En cuanto a los aportes del Gobierno nacional, el edil consideró que “no se están pagando los subsidios de manera racional y con plazos establecidos”. Asimismo, recalcó que “es importante tener la certeza de saber qué va a pasar, porque si las autoridades dicen que se mantienen los subsidios es una situación, si se van a achicar es otra y si se quitan otra”.
Aguiar estimó que la falta de información y determinaciones por parte del Gobierno nacional puede tener que ver con la expectativa de la aprobación de la Ley Ómnibus, aunque destacó que tanto ese proyecto como el Decreto de Necesidad y Urgencia que está en vigencia desde finales del 2023 no tienen ningún artículo que de forma específica refiera al sistema de transporte y a los fondos que se destinan para su funcionamiento.
“Tenemos la prórroga del Presupuesto 2023 en virtud de que no se aprobó uno para el año 2024, es decir que las partidas aprobadas podrían irse ejecutando, destacando que el presupuesto del 2023 se aprobó en octubre del 2022 y hubo un proceso inflacionario del 250% o 260% en ese período”, planteó Aguiar.
