Creció en los últimos meses el número de denuncias de casos de abuso infantil en Jujuy y desde la Justicia lo atribuyen a que actualmente existe entre los menores un mayor conocimiento sobre lo que significa una agresión sexual.
El juez Luis Kamada, integrante del Tribunal Criminal Nº 2 de la provincia, en diálogo con nuestro medio indicó que “se advierte un incremento de la cantidad de denuncias que se están formulando” en relación a casos de abuso de menores. Señaló que “es bastante entendible en el contexto que nos permite saber que hay niños afortunadamente más informados de lo que significa una agresión sexual”.
“Quizá antes esta circunstancia pasaba desapercibida, pero hoy las víctimas de estos hechos están al tanto de los límites de cualquier avance sobre su sexualidad o su integridad física”, explicó.
Detalló que en el tribunal que integra, durante 2021 se resolvieron 58 causas de abuso infantil y en lo que va del año 2022 ya son 7 las causas en las que hubo una condena.
Explicó que “esto no quiere decir que sean todas las causas, sino que son las que están resueltas, porque hay otras tantas en trámite que naturalmente llegarán a la instancia correspondiente de ser resueltas”.
LOS AGRESORES SON PERSONAS ALLEGADAS
Camada detalló que en la gran mayoría de los casos, “prácticamente un 90% de los que llegan a juicio, los imputados son personas muy allegadas al niño o a la niña víctimas”.
“Estamos hablando de parientes directos, convivientes, personas allegadas al grupo familiar en un grado de confianza suficiente para ejercer por ejemplo la guarda del niño o de la niña”, indicó y explicó que “muchas veces las reuniones familiares o con amigos provoca que haya una cierta proximidad que le facilita al agresor acceder a su víctima”.
Señaló a su vez que en muchos casos de este tipo “estuvo de por medio el consumo de alcohol o alguna substancia”, aunque aclaró que no se da en la mayoría de las situaciones que llegaron a juicio.
SITUACIONES CÍCLICAS
El juez explicó además que “hay determinadas épocas del año en las que en Jujuy se incrementa este tipo de conductas, por dar un ejemplo durante el Carnaval o este tipo de reuniones”. Señaló que “se produce una suerte de estallido de estas situaciones, como hay otras en las que se ameseta”.
En ese sentido explicó que “tiene que ver mucho seguramente con una proximidad física o la baja del nivel de alarma en otros casos” y reiteró que “en definitiva esto se refleja en una cuestión de carácter cíclico”.
