por En un histórico anuncio realizado este jueves, se confirmó que Argentina, junto con Irán, Arabia Saudita, Egipto, Etiopía y Emiratos Árabes Unidos, se unirá oficialmente al bloque BRICS a partir del 1 de enero de 2024. Esta decisión marca un paso significativo para Argentina en términos de oportunidades económicas y comerciales en medio de un contexto global desafiante. Pero, ¿qué es el BRICS y cómo beneficiará a Argentina?
El BRICS, un acrónimo que engloba a Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, es un bloque económico, político y social que ha destacado como un paradigma de cooperación Sur-Sur desde su creación. Surgido en el año 2000, reúne a las economías emergentes más prometedoras del mundo, caracterizadas por su amplia población, vastos territorios y abundantes recursos naturales. Estas naciones también comparten un notable crecimiento en sus productos internos brutos (PIB) y una significativa presencia en el comercio global, lo que las convierte en atractivas opciones para inversiones internacionales.
Desde 2009, los países miembros del BRICS han mantenido cumbres anuales, en las cuales cada nación anfitriona se turna para recibir a los líderes de los otros miembros. Esta plataforma ha impulsado la cooperación en diversas áreas y ha fomentado un crecimiento conjunto en un mundo cada vez más interconectado.
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La noticia sobre la inclusión de Argentina en este bloque fue anunciada después de la conclusión de la XV cumbre, que tuvo lugar en Johannesburgo y contó con la participación del presidente sudafricano Cyril Ramaphosa. Además de Argentina, otros países también se unirán al BRICS, marcando una expansión significativa del grupo.
Para Argentina, el ingreso al BRICS representa una serie de ventajas económicas cruciales. En un momento en que el país se enfrenta a desafíos como la escasez de reservas del Banco Central, la alta inflación y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), esta incorporación brinda oportunidades para ampliar los destinos comerciales y aumentar las exportaciones, lo que a su vez generaría un flujo de divisas necesario para la estabilidad financiera.
Un aspecto relevante es el acceso a créditos inmediatos del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD) de los BRICS, cuya sede se encuentra en la ciudad china de Shanghái. Estos fondos podrían ser de gran utilidad para abordar las necesidades financieras urgentes y respaldar proyectos de desarrollo en Argentina. La titular del NBD, Dilma Rousseff, ya ha mantenido reuniones con el ministro de Economía argentino, Sergio Massa, en vistas a esta futura colaboración.
Además, la membresía plena en el BRICS significa un aumento considerable en las relaciones comerciales con los miembros actuales y otros países emergentes. Una de las principales metas del bloque es fortalecer los sistemas de acuerdos multilaterales entre sus naciones miembros y terceros países. Esto brinda a Argentina la oportunidad de diversificar sus socios comerciales y fortalecer su presencia en el escenario global.
Geopolítica: implicancias de la unión al BRICS
Ahora bien, la relevancia de esta asociación es sobre todo geopolítica, ante un escenario de mundo multipolar, donde Occidente ya no es el único centro gravitante de la política, el comercio y las finanzas. Rusia es capaz de desplegar su poderío militar -un hecho que vio dramáticamente en la invasión a Ucrania-, Brasil permanece como una superpotencia americana, y Sudáfrica es la nación más desarrollada de su continente. China, por su lado, compite directamente con los Estados Unidos en materia de inversión y mercados de cada región.
La cuota de los BRICS en el PIB mundial alcanzó el 31,6% (calculado a paridad de poder adquisitivo), y ya supera la de las economías del G7 (29,9%) aunque en términos nominales, estos siguen representando el 45% del PIB mundial frente al 70% que registraba en los años noventa.
