RETRO
por La década de los 90 estuvo marcada en la Argentina por un fuerte incentivo al consumo y, en especial, para los más pequeños, llegaron diferentes propuestas que causaron más de un dolor de cabeza a sus padres. Además, con el avance tecnológico, no solo se sumaron los juguetes convencionales, sino que también más de uno con “ribetes” electrónicos . En la actualidad, estos mismos podrían valer una fortuna gracias a los coleccionistas.
Si sos amante de lo retro y añorás lo mejor de los 90, de seguro te vendrán a la mente algunas de las publicidades de los juguetes más famosos, de esos que sí o sí querías tener. De igual manera, si lograste conservar en un estado casi óptimo alguno de ellos, o mejor aún, si nunca los sacaste de su empaque original, es probable que su valor haya subido con el correr de los años.
Estos son los cinco juguetes de los 90 que podrían valer una fortuna
Tamagotchi
El Tamagotchi fue furor tras salir al mercado y se convirtió en el primer juguete tecnológico para las masas, lo que permitía un acceso directo “al futuro”. Este aparato del tamaño de la palma de una mano adulta permitía imaginar a todos sobre cómo sería el nuevo milenio.
Se trataba de una mascota a la que debías mantenerla a diario; desde darle de comer, sacarla a pasear y proponerle diferentes actividades, con el fin de que no muriera. En Amazon, estos artefactos originales cuestan entre 20 a 70 dólares.
Cartas de Pokémon
En los 90 surgió la tendencia de coleccionar cartas de dibujos animados y en medio del auge de la serie japonesa Pokémon aparecieron las cartas con cada uno de los “animalitos” y sus descripciones. El fin último era competir con otra persona y quien tuviera mejor armado su mazo, ganaba la batalla. Del mismo modo, a la par también desembarcaron otras de Dragon Ball y Yu-Gi-Oh!
La baraja que se vendió más cara en relación con Pokémon es la que conoce como “Pikachu Illustrator Card” por 226.000 dólares. El precio tiene como fundamento que solo se hicieron 30 y se otorgaron como premios en un concurso de ilustración. Las demás cartas “especiales” pueden variar entre los 1600 dólares hasta los 10.000.
El Furby
El Furby es un “animal” anacrónico que se asemeja a un búho y a un hámster. Se lanzó por primera vez en 1998 y todavía se ofrece en el mercado bajo la firma de Hasbro. Este fue el primer intento exitoso de vender un robot dirigido al ámbito doméstico. Un ejemplar de esa época podría valer 250 dólares.
Nintendo Game Boy
El Game Boy es una videoconsola portátil que apareció en Japón en 1989 y que se expandió a Europa y a América en 1990. Si bien, en un principio, fue criticada por ser inferior al Sega Game Gear o al Atari Lynx, también cautivó a miles de niños y niñas que insistieron en tener uno. En la actualidad, el original de aquella época, en un estado óptimo de conservación, incluso con la caja y los cartuchos de juego, podría valer entre 300 a 1500 dólares.
My Little Pony
Los ponis de colores surgieron en 1983 de la mano de Hasbro. Luego de su éxito en los Estados Unidos y la primera película estrenada en 1992, la “fiebre” se expandió en el exterior y desde entonces la marca fue renovada cinco veces con nueva y actualizada imagen. Los originales podrían alcanzar los 100 dólares en el mercado.
Fuente: La Nación
