Durante los últimos días, y ya conociendo los candidatos provinciales para las elecciones de junio, la difícil situación económica se lleva la atención de todos los ciudadanos argentinos.
Como ya expresamos antes en estas columnas, la inflación, el estancamiento del crecimiento de los sectores productivos, la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores, el crecimiento imparable de la pobreza y la indigencia, nos presentan un escenario electoral conflictivo y complicado.
Los argentinos, esperamos conocer quiénes serán los candidatos a presidente y si ellos participarán de los PASO para dirimir entre las mejores propuestas, a los que pueden conducir este país en este momento.
Pero lamentablemente, y hasta ahora no hemos escuchado propuestas o ideas para salir de la crisis, sino especulaciones personales y encuestas con cifras que asombran.
Entre las figuras que asoman pretendiendo el cargo, se presenta la ex presidenta Cristina Fernández, quien juega a las escondidas entre sus seguidores kirchneristas y entre los ciudadanos comunes que esperan que vuelva a conducir los destinos del país. La ex mandataria, se muestra esquiva con respecto a los medios, y presenta su libro en la Feria del Libro una autobiografía sin hablar de política. Se dice que Cristina Fernández quiere esperar hasta último momento para confirmar su candidatura, segura de poder ganar con comodidad los comicios.
Por otra parte, emerge con fuerza la figura de un ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, quien ya fue candidato en otras elecciones y se muestra moderado en todas sus opiniones. Tampoco se sabe si Lavagna competirá en las PASO, con otros pre candidatos como el gobernador de Salta Juan Urtubey, Sergio Massa y el senador Miguel Pichetto, quienes conforman el espacio del Peronismo Federal. Tal vez el ex ministro que piloteó una de las peores crisis del país desde el 2002, puede ser la alternativa que los ciudadanos elijan entre el actual gobierno y el kirchnerismo.
Finalmente el actual presidente Mauricio Macri, quien cada día enfrenta la caída de su imagen positiva y la intención de voto, luego de 4 años de promesas incumplidas y del descontento de los argentinos por la actual crisis económica.
Aunque el PRO insiste en que es el único rumbo posible y repetirá su candidatura, algunos especulan que la gobernadora María Eugenia Vidal podría ser la alternativa del oficialismo para no perder las elecciones. Tampoco se sabe quien acompañaría a Macri como vice y estos interrogantes solo se conocerán al momento de presentar las candidaturas de las PASO.
El triunfo del peronismo no kirchnerista en Córdoba, pone a su actual gobernador Juan Schiaretti con una opinión muy preponderante dentro del Peronismo Federal. Y el apoyo del gobierno nacional a los candidatos radicales en esa provincia, no hizo sino empujarlos hacia debajo de una tabla que preocupa al gobierno nacional.
En los próximos meses, se dirime nuestro futuro y no podemos estar indiferentes a ello.
