Las condiciones deplorables, las constantes irregularidades y la mala gestión, llevaron a que la Federación de Basquet de la provincia, fuera intervenida por el Estado para su mejoría y buscar regularizar la situación de la asociación.
Los interventores se encontraron con una Federación de Basquet destruida, y tienen al rededor de 180 días para la remodelación de la misma, que sin dudas dependerá de la cantidad de trabajo que haya que hacer.
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"Hay que partir de una base, realmente está deteriorada, además hay que ver si los jugadores están fichados, que jugadores están o no, una base de datos regenerada, ese trabajo lleva mucho tiempo hacerlo" relató Kingard en diálogo con Canal 7 de Jujuy.
Por su parte, Octavio Rivas otro de los interventores, manifestó que "existían asociaciones irregulares, ficticias para la ley, no había libro contable, ni sede, absolutamente nada, se usaba como pantalla constituida para perpetuarse en el poder y nunca se hicieron elecciones".
