Decenas de trabajadores acompañados por familiares y organizaciones políticas y sindicales marcharon en la mañana de hoy por las calles de Palpalá para exigir que la empresa Fundición Aguilar no cierre sus puertas y continúe funcionando.
El jueves pasado, directivos de Fundición Aguilar comunicaron a los delegados gremiales que la firma se encontraba en quiebra y por ello la empresa dejaba sin trabajo a la totalidad del plantel de empleados. Al conocerse la noticia rápidamente los trabajadores recibieron el apoyo de diversos sectores sociales y políticos que se solidarizaron con la situación y por ese motivo hoy decidieron movilizar para expresar su rechazo a la medida tomada por la empresa.
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La solicitud de los empleados de Fundición Aguilar es que en conflicto pase a la órbita de la provincia aunque por el momento las reuniones se mantienen en el ámbito del Ministerio de Trabajo de la Nación.
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“Nosotros estamos pidiendo la reactivación de la planta porque nuestra bandera es que si Mina Aguilar continúa funcionando, nosotros no tenemos por qué perder nuestro trabajo”, expresó Guillermo Tito, delegado gremial de Fundición Aguilar.
Además, el trabajador, al cual no lo dejaron ingresar a la reunión mantenida ayer en las instalaciones del Ministerio de Trabajo de Nación, sostuvo que en la misma, la parte conciliadora junto con los delegados de la Unión Obrera Metalúrgica firmaron el pedido del traslado del conflicto a la provincia pero la empresa se negó a hacerlo.
“Queremos que el gobierno tome cartas en el asunto e intervenga ya que hay 128 despidos directos y más de 200 indirectos porque también trabajan camioneros, personal de seguridad, de lavandería, construcción y tercerizados que quedaremos afuera de la planta”, concluyó Tito.
