El presidente de la Nación, Alberto Fernández, participó anoche de una entrevista televisiva con Viviana Canosa desde la Casa Rosada en la que, entre otros temas, se refirió a la situación judicial de Milagro Sala.
"¿Qué va a pasar con Milagro Sala?", fue la pregunta de la entrevistadora y Fernández retomó las expresiones de Gerardo Morales en relación a la voluntad de que la Corte Suprema revise las causas en las que Milagro Sala está condenada e imputada. "Eso nos daría a todos una gran tranquilidad, porque tenemos muchas dudas sobre cómo funcionaron esos procesos en Jujuy".
Se refirió además a la situación de la vice presidenta: "Cristina fue víctima de una mala justicia. Es víctima aun hoy. Se enojan cuando lo digo, pero es verdad. En campaña hasta di nombres y se enojaron. Pero tampoco quise involucrar a toda la Justicia, que está llena de jueces probos", dijo Fernández.
Para el Jefe de Estado, el Poder Judicial fue descuidado por mucho tiempo como institución, por lo que volvió a hacer hincapié en la importancia de una reforma judicial, al igual que lo hizo en la apertura de sesiones ordinarias en el Congreso Nacional. Y opinó: "Es un tema serio: no voy a tener un Comodoro Py. La Justicia no tiene que ver qué teléfono la llama".
Asimismo, aseguró que no habrá "jueces amigos" durante su Gobierno. "Conmigo los jueces pueden sentarse a esperar, no los voy a llamar nunca. Que hagan lo que tengan que hacer, pero que sean jueces dignos", aseguró.
También, opinó sobre el accionar de la Justicia al servicio de los gobiernos de turno, y aseveró: "Eso conmigo se terminó, no lo quiero más. He visto sufrir mucha gente con detenciones injustas", dijo.
Por último, se refirió al proyecto de ley para reformar las jubilaciones especiales del sistema judicial. "Espero que el Senado la convierta en ley este jueves. Es poner un poquito de orden, simplemente. Me causa gracia cuando dicen que es la ley del vaciamiento judicial, que 'Alberto quiere vaciar la Justicia'", dijo.
Y luego, aclaró: "Nadie está obligado a jubilarse, eh. Pueden quedarse. Lo que les pedimos es que se adecuen a una nueva realidad. El que se jubila privilegia su bolsillo y es legítimo. Pero que no me digan que estoy vaciando la Justicia: que se queden y que sigan haciendo lo que deben hacer como jueces".
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