En esta mañana de marzo , con amarillos ausentes y calores rezagados puedo ver a través de la ventana de la radio gente que va y viene con gestos adustos y mandíbulas contraídas, apurados por llegar a su destino, cumpliendo voluntades ajenas y esquemas predeterminados, en la radio se escucha una canción que habla de la vida, del no rendirse jamás, de la celebración que debemos realizar cada vez que despertamos y me genera una reflexión para compartir con vos, sí , con vos que estás leyendo estas reflexiones otoñales.
Hace tiempo por decisión o por las circunstancias comencé a concentrarme más en la parte superficial de la vida sin detenerme a pensar que la verdadera felicidad estaba en las pequeñas cosas pero con grandes significados, tal es así que entre el ruido y las voces vacías me perdí en el camino.
No obstante hoy más consciente y con la claridad que te dan los años asumo mi compromiso para recordarte y recordarme que cuidemos nuestros afectos, que forjemos nuestra autoestima y el perdón se convierta en parte activa de nuestra alma.
Quiero decirte que sé por lo que estás pasando, sé que han sido tiempos complicados., que ha habido y hay momentos difíciles y tristes, asimismo quiero que sepas que estarás más que bien y seguro pronto estarás mejor.
También quiero que tengas en claro que nunca estarás solo y que cuando te invada ese sentimiento de soledad y tristeza recuerdes que te tienes a vos como compañero y cómplice de infinitas aventuras a lo largo de tu existencia.
Además quiero que sepas que en algún lugar del mundo alguien se siente orgulloso de vos y te admira y respeta tu coraje y valentía por todo lo que has logrado, por todo lo que has sufrido, por todo lo que has llorado, por todo lo que has reído, por todo lo que has perdido y por todo lo que has encontrado en los caminos de la vida.
Espero que siempre puedas ver y tomar consciencia de la riqueza que tienes de estar vivo, de haber despertado esta mañana y ser testigo del sol, las nubes, los colores, sabores y olores que nos llegan sin pedir permiso pero que nos hacen inmensamente humanos y felices.
¡FELICES PASCUAS! ABRAZOS AL ALMA.