Opinión
POLÍTICA

¿Generar esperanza o inocular veneno?

urna voto elecciones cuarto oscuro
urna voto elecciones cuarto oscuro

Claudio Gareca por Claudio Gareca | 06-11-2023 16:42

La segunda vez que la Argentina va a un balotaje será este 19 de noviembre, como tramo final de una campaña electoral súper larga, agotadora y en un contexto donde reina la incertidumbre. Una campaña extremadamente polarizada cargada de discursos de odio, con un framing o encuadre discursivo que deslegitima al sistema político. 

Por ello es que se reconfigura el escenario político con la dinámica que le imprime la acción política apelando al miedo. Miedo que se inocula al elector para hacerle ver la posibilidad de un acontecimiento desagradable, de una amenaza y le señala que debe hacer para evitar ese resultado. Ese mensaje se usa para disuadir de que voten al adversario o movilizar al propio votante y que juega con dos miedos, los miedos permanentes, a perder algo valioso y los miedos concretos, es decir lo que un candidato puede provocar. 

Vengo sosteniendo que se trata de una campaña formateada en términos contra identitarios, donde los candidatos resaltan y remarcan fuertemente que ninguno tiene puntos de contacto con el otro, que uno es la antípoda del otro, donde se niega al otro, incluso se humilla y se denigra al otro. 

Entonces el tablero político queda planteado de la siguiente manera, por un lado, tenemos la figura de Massa que intenta mostrarse distinto al kirchnerismo, para evitar la etiqueta de que son lo mismo y de continuidad de aquella gestión. Por otro lado, tenemos el acuerdo Macri/Bullrich y Milei con un encuadre comunicacional que plantea un cambio, terminar con el kirchnerismo y cancelar a la casta. 

La incorporación de juntos por el cambio además determinó que los votantes duros de Milei, asentados discursivamente en la anti casta, se vieran obligados a abandonar el espacio libertario, reforzando más aun sus decisiones con respecto al desencanto que significó la gestión macrista. Aunque la libertad avanza mantiene la idea de rompimiento del status quo político, Massa, frente a ello, sostiene la idea de unidad nacional.

Las idas y vueltas de Milei en sus propuestas, las inconsistencias de ellas, y la constante necesidad de querer aclarar lo que se sostuvo anteriormente, determinó que aquellos que no fueron a votar en la elección anterior, las paso, se inclinaran por Massa, cuya estrategia comunicacional se muestra más coherente y prolija, con un discurso más moderado, sin necesidad de dar fuertes virajes en la comunicación. 

El candidato de unión por la patria demostró sus habilidades comunicacionales, de forma profesional, gracias además a su experiencia en la arena política, manteniendo los votos obtenidos, sumando a aquellos que no participaron en las paso y activando el voto de quienes eligieron a fuerzas que no superaron el umbral electoral.

La Libertad Avanza logro acarrear 700.000 votos entre elecciones, cuya transferencia seria de una fracción de juntos por el cambio y una porción de aquellos que no participaron también de las paso. En unión por la patria saben que no cuentan con el electorado cordobés que sigue a Schiaretti, sí con un porcentaje de votos, quizás, de seguidores de Llaryora y Natalia de la Sota, que expresamente manifestaron su apoyo a Massa.  

En definitiva, el desafío para ambos candidatos es mantener el caudal de votos obtenidos en la última elección, e ir en busca de más electores. Esa tarea requiere de un gran esfuerzo tratando de aumentar y asociar a los candidatos a características positivas de liderazgo, demostrando principalmente empatía con la ciudadanía y dejando de jugar con fuego que pueden quemarnos a todos.  

Difícil tarea en este tramo final de la campaña que el 19 de noviembre pondrá punto final a la incertidumbre.